En los últimos años, los avances tecnológicos han tenido un impacto significativo en varias industrias, y el sector financiero no ha sido la excepción. El vínculo entre tecnología y finanzas ha redefinido la forma en que las personas interactúan con el dinero, gestionan sus inversiones y realizan operaciones financieras.
Ahora bien, ¿Cuáles han sido las transformaciones más importantes en el manejo de los recursos financieros?
Blockchain y criptomonedas
El surgimiento de las criptomonedas en 2009 ha sido un hecho crucial en el ámbito financiero. Estas monedas digitales se basan en la tecnología blockchain descentralizada. Lo interesante es que ofrecen autonomía en la gestión, sin depender de instituciones gubernamentales o bancarias. Su escasez en la oferta y la incapacidad para duplicarlas las vuelven atractivas como reserva de valor.
Las criptomonedas son aceptadas en muchos países, y han facilitado la circulación de dinero en situaciones económicas adversas. También ofrecen mayor privacidad y menores costos de transacción, lo que las convierte en opciones atractivas en diversos sectores, incluyendo los juegos online. Por ejemplo, las personas que disfrutan de los juegos de casino en línea como el póker o la ruleta, pueden pagar a través de la tecnología blockchain.
En este caso, se aceptan pagos a través de intermediarios como PayPal, que ofrecen transferencias en criptomonedas, por lo que es posible convertir los ahorros de las monedas digitales en dinero fiduciario. Afortunadamente, cada vez más compañías que provienen de sectores como el turismo, la informática, la gastronomía y el e-commerce ofrecen esta forma de pago.
Empresas como Amazon, Twitch y Starbucks aceptan monedas digitales. Asimismo, hay una gran cantidad de sitios web como Expedia, Alternative Airlines y Travala que ofrecen servicios turísticos como la compra de boletos de avión, alojamiento o la renta de automóviles, que pueden pagarse con criptodivisas.
Además, la tecnología blockchain ha demostrado ser muy útil en la automatización de contratos inteligentes. Esto podría ofrecer soluciones a la trazabilidad financiera, mejorar la transparencia del sector público y contribuir al sector inmobiliario y de seguros, entre otros.
Inteligencia artificial (IA)
La IA ha sido otro factor importante en la evolución del sector financiero. La capacidad de procesar grandes cantidades de información y aprender de ella ha llevado a la aparición de asesores financieros virtuales que complementan el trabajo de los asesores tradicionales. Además, la IA ha mejorado significativamente la detección y la prevención de fraudes en tiempo real, permitiendo bloquear transacciones sospechosas para proteger los activos de los clientes.
Por otra parte, la convergencia entre la tecnología y las finanzas ha dado origen a la Tecnología Regulatoria (RegTech), que ofrece soluciones para el cumplimiento normativo. El uso de tecnologías como la inteligencia artificial y el análisis de datos en la industria RegTech ha revolucionado la forma en que las empresas enfrentan las regulaciones gubernamentales. Las soluciones son verdaderamente amplias e incluyen el monitoreo automatizado de las transacciones financieras, la presentación de informes regulatorios y la gestión de riesgos. Este tipo de herramientas han demostrado que reducen los costos y mejorar la transparencia en múltiples industrias.
Democratización de las finanzas
Las FinTechs ha jugado un papel muy importante en la democratización financiera, ofreciendo soluciones simples y accesibles. Según el Global Findex Database, publicado por el Banco Mundial, en 2017 solo el 69 % de los adultos en todo el mundo tenía cuentas bancarias. Sin embargo, gracias a la adopción de tecnologías financieras innovadoras, el acceso a servicios como pagos, préstamos e inversiones ha mejorado significativamente. Para 2021, el porcentaje alcanzó el 76 % de la población adulta mundial. Indudablemente, las aplicaciones móviles y las plataformas en línea han facilitado la inclusión financiera, alcanzando a muchísimas más personas en diferentes regiones.
En resumen, los avances tecnológicos han transformado el sector financiero, mejorando la eficiencia y reduciendo costos. Aunque aún existen desafíos a resolver, como la protección de datos y la privacidad de los usuarios, la tecnología debe centrarse en crear valor y poner a las personas en el centro del sistema financiero. Con la continuación de la innovación tecnológica, se espera que esta relación transformadora siga impulsando cambios significativos en el panorama financiero global.