Este lunes, el diputado federal Eros Ferreira Biondini, perteneciente al Partido Liberal, en pleno auge de la popular criptomoneda, presentó un proyecto de ley para crear la Reserva Soberana Estratégica de Bitcoins (RESBit, «por sus siglas en portugués») en Brasil, el cual tendría en sus reservas hasta un 5% en este activo digital.
Esta noticia es importante, ya que vale recordar que en Brasil, ya se había legalizado el uso de bitcoin (BTC) como medio de pago en 2022, con la aprobación del proyecto de ley cripto PL 4401/2021 y posee una amplia regulación del uso de criptoactivos en su economía.
El nuevo proyecto de ley identificado como PL 4501/2024, en el sitio Web de la Cámara de Diputados del Palacio del Congreso Nacional, “prevé la formación de una Reserva Soberana Estratégica de Bitcoins por parte del Gobierno Federal y prevé otras medidas”.
En el artículo 1 de este proyecto de ley, impulsado por el diputado federal Biondini, explica por sí mismo, que el fin de la RESBit es: “Diversificar los activos financieros del Tesoro Nacional brasileño”; “Proteger las reservas internacionales contra las fluctuaciones cambiarias y los riesgos geopolíticos” y “Fomentar el uso de tecnologías blockchain en el sector público y privado”.
Por último, el proyecto de ley para la creación de la RESBit en Brasil, debe servir de “soporte de garantía para la emisión de moneda digital brasileña (Real Digital – Drex)”, la moneda digital de banco central (CBDC, «por sus siglas en inglés») que está siendo desarrollada por el Banco Central do Brasil (BCB, «por sus siglas en portugués») y que funciona desde 2023.
Las CBDC, representan en casi todos los países una realidad. Algunos más adelantados que otros, exploran este tipo de activo criptográfico, que digitalizan sus monedas fiduciarias, sin necesidad de emitir papel moneda.
Hasta ahora sus defensores señalan que traerá la democratización del acceso al dinero y la bancarización real, mediante la tokenización de sus transacciones. Mientras que los detractores, señalan que las CBDC sólo servirán para controlar a las personas su acceso a los bienes y servicios.
Esto no ha minado la voluntad de las autoridades monetarias y las organizaciones internacionales de todo el mundo, que continúan trabajando en su implementación. El RESBit servirá de soporte a la CBDC brasileña que se encuentra en período de pruebas o “Piloto Drex”, el cual está programado que finalice a finales de este mismo año.
Asimismo, se ordena que el BCB, junto con el Ministerio de Hacienda de Brasil, sean las instituciones responsables de la gestión de la RESBit, diseñando sistemas avanzados de monitoreo y control, que utilicen tecnologías de inteligencia artificial y blockchain, para garantizar la integridad de las operaciones con la Reserva Soberana Estratégica de Bitcoins brasileña.
Igualmente, ambas instituciones deberán “garantizar la custodia de los activos digitales de acuerdo con los más altos estándares de seguridad, utilizando métodos como billeteras frías y protocolos de respaldo descentralizados” y “establecer y mantener una infraestructura robusta para proteger los bitcoins contra riesgos cibernéticos, fraudes y accesos no autorizados”, entre otras responsabilidades.
De acuerdo al texto del proyecto de ley, la gestión de la RESBit implicará varias directrices cómo “la adquisición planificada y gradual de Bitcoin (BTC), limitada a hasta el 5% de las reservas internacionales brasileñas”; llevar a cabo “la transparencia en la gestión de activos, con divulgación de informes bianual al Congreso Nacional y a la sociedad” y seguir el “cumplimiento de la Ley de Responsabilidad Fiscal, garantizando que las operaciones no comprometan el equilibrio de las cuentas públicas”;
Del mismo modo, el proyecto de ley propone en sus directrices, efectuar el “almacenamiento seguro de bitcoins, mediante el uso de tecnologías como billeteras frías y otros mecanismos reconocidos internacionalmente”.
Por razones obvias, desde que el presidente electo de EEUU, Donald J. Trump, ofreció en plena campaña electoral, cuando era todavía un candidato en julio de este año, crear una Reserva Estratégica Soberana de Bitcoins para convertir a ese país en la Capital Bitcoin del planeta, la idea comenzó a calar en varios gobiernos que evalúan medidas similares.
Y cuando la senadora republicana por Wyoming, Cynthia Lummis, presentó a finales de julio una propuesta denominada “Para impulsar la innovación, la tecnología y la competitividad mediante la inversión optimizada a nivel nacional” (Ley BITCOIN, «por sus siglas en inglés»), que también ordena crear una reserva estratégica de Bitcoin para los Estados Unidos, se creó el precedente.
El proyecto de Lummis, prevé la adquisición y el almacenamiento de la criptomoneda Bitcoin por parte del gobierno estadounidense. Por ello, los analistas consideran que ese proyecto de ley, posiblemente ha impulsado una carrera política a nivel de gobiernos, para adoptar Bitcoin como reserva para sus naciones, buscando obtener enormes beneficios estratégicos con la revalorización a largo plazo.
Como muestra de ello, está El Salvador, cuyo presidente Nayib Bukele adoptó a Bitcoin como moneda de curso legal en ese país, convirtiéndolo en parte de su estrategia financiera, que le ha otorgado unos importantes beneficios tras el último rally de la criptomoneda creada por Satoshi Nakamoto, los cuales se pueden constatar con el Nayib Bukele Portfolio Tracker.
De allí que, el diputado brasileño ha reconocido que con este proyecto de ley, también busca generar ganancias pasivas para la economía de ese país, mediante la revalorización del este criptoactivo a largo plazo, pero también como un efectivo método de ampliar sus reservas internacionales.
De acuerdo un reporte del Banco Mundial, las reservas internacionales de Brasi0l al cierre de diciembre de 2023, alcanzaban los 355.000 millones de dólares. No obstante, de acuerdo al sitio Web del BCB, se señala que las reservas internacionales brasileñas cerraron en el pasado mes de octubre en 366.095 millones de dólares.
Estas reservas internacionales de Brasil están conformadas por un conjunto de activos en moneda extranjera, que brindan seguridad a la nación en medio de desastres naturales, derrumbe de la economía, guerras, conmoción social interna, etc., brindando a Brasil la posibilidad de cubrir sus obligaciones en el exterior y shocks externos.
Este conjunto de activos que conforman reservas internacionales brasileñas, van desde bonos, depósitos en divisas (dólar, euro, libra esterlina, yen, dólar canadiense y dólar australiano), los cuales son mantenidos por el banco central en sus arcas.
Sin embargo, por regla general las reservas de los países son utilizadas para respaldar la moneda fiduciaria, estabilizar la economía y apoyar el comercio internacional. Lo que propone el diputado federal Biondini, es incorporar al menos un 5% del monto total de las reservas a este conjunto de activos.
Si este proyecto llega a ser aprobado, muchos más países podrían asumir la misma postura, llevando el precio de Bitcoin a nuevos máximos ante la eventual demanda de los gobiernos para sus reservas internacionales.