El Servicio Secreto de Estados Unidos (USSS, «por sus siglas en inglés») ha intensificado drásticamente su ofensiva global contra el fraude y otros delitos en el ámbito de las criptomonedas, y una parte fundamental de esta estrategia es formar a los países socios de EEUU, con habilidades de rastreo de blockchain de última generación.
En medio de esta estrategia, que alcanza a más de 60 países en todo el mundo, el USSS determinó que existe una amenaza creciente del fraude relacionado con criptomonedas que está golpeando tanto a los estadounidenses como a personas en todo el mundo.
Este fraude relacionado con criptomonedas ha explotado en los últimos años de forma considerable, generando alarma en las autoridades y agencias de aplicación de la ley. Tan solo en 2024, los estadounidenses reportaron pérdidas por 9,3 mil millones de dólares debido a estafas con cripto. Esto representa claramente un aumento del 66% respecto al año anterior.
Dada la naturaleza descentralizada de los activos digitales, el alcance del fraude con estos es literalmente global. Y es que, los delincuentes aprovechan la capacidad transfronteriza de las criptomonedas y las debilidades regulatorias en ciertas jurisdicciones para operar globalmente.
Estos fraudes con criptomonedas, incluyen plataformas de inversión falsas, estafas románticas (conocidas como “pig butchering”), suplantación de identidad y por supuesto, los conocidos esquemas Ponzi, en los cuales, las víctimas son atraídas con promesas de altos rendimientos hasta que la plataforma desaparece y se lleva los fondos.
Si bien es cierto, que otras agencias de carácter global y local, ya se ocupan de los delitos informáticos, así como también de la ciberdelincuencia, el USSS ha estado trabajando para tomar un papel determinante contra el cibercrimen en el ecosistema de las criptomonedas.
Aunque tradicionalmente se conoce al USSS por la protección presidencial y la lucha contra la falsificación de moneda, su mandato se ha expandido para salvaguardar la infraestructura financiera de EEUU, lo que ahora incluye los delitos financieros digitales.

El Centro Global de Operaciones de Investigación (GIOC, «por sus siglas en inglés») del USSS, se ha convertido en la punta de lanza de la iniciativa. Está compuesto por un equipo especializado de analistas que utilizan herramientas digitales y de código abierto para rastrear actividades fraudulentas.
Dado que el USSS posee investigadores de alto nivel y expertos en análisis de blockchain, inteligencia de código abierto, así como también especialistas en el análisis de datos de registro de dominios, carteras de criptomonedas y direcciones IP, esta agencia ha decidido incursionar en el ataque a las actividades criminales con criptomonedas.
Los investigadores y expertos en activos digitales del USSS que pertenecen al GIOC, tienen la paciencia y la capacidad tecnológica para realizar análisis meticulosos que son factores cruciales para reconstruir el rastro on Chain, de los fondos ilícitos.
Además, el equipo de especialistas en activos digitales del GIOC, poseen una gran formación, datos y tecnología, por lo que han sido capaces de apoyar en la confiscación de casi 400 millones de dólares en criptomonedas durante la última década, según un informe reciente divulgado por el medio estadounidense Bloomberg.
De hecho, una de las recuperaciones más grandes y recientes en las que intervino también el USSS junto a otras fuerzas del orden en EEUU, involucró la recuperación de 225 millones de dólares en la stablecoin Tether (USD₮), vinculados a estafas románticas.
El rastreador de subastas de confiscaciones realizado por Jameson Lopp, el conocido cypherpunk estadounidense de la vieja escuela, ingeniero de software, columnista y defensor de Bitcoin, revela que las autoridades estadounidenses han confiscado y subastado a lo largo de los años más de 195.091,75 BTC, con un valor actual de 21.029.915.191 millones de dólares.
Aunque, este rastreador también revela que las ventas de estas confiscaciones, apenas han generado en dólares estadounidenses 366.493.104 dólares, dejando ganancias potenciales en USD perdidas en más de 20.663.422.087 dólares, pero eso es otra historia que no depende del USSS.
Como parte de su iniciativa para pasar a la ofensiva contra el cibercrimen asociado a las criptomonedas, el USSS, ha adoptado una Estrategia Global de Entrenamiento y Colaboración con los socios de Estados Unidos, para atacar el problema de una forma más amplia.
Los agentes de campo del USSS brindan talleres de capacitación totalmente gratuitos para agencias de aplicación de la ley en más de 60 países. En estos talleres el USSS enseña a la policía local y a los fiscales cómo identificar patrones fraudulentos en los datos de blockchain y cómo rastrear a los perpetradores.
Del mismo modo, el USSS informa cómo utilizar la ventaja táctica de la tecnología blockchain. Y es que, aunque los delincuentes creen que el uso de criptomonedas les permite operar con impunidad, la transparencia inherente de la tecnología blockchain (donde todas las transacciones son públicas) puede ser una ventaja táctica para las fuerzas del orden si saben cómo explotarla.

El programa del USSS, se centra en regiones donde la falta de supervisión o los programas de “residencia por venta” atraen a los delincuentes financieros. El objetivo es empoderar a las autoridades locales para que identifiquen y combatan el fraude dentro de sus propias fronteras.
También el USSS trabaja en estrecha colaboración con actores de la industria cripto, como Coinbase y Tether (por citar a dos actores de amplio alcance) para rastrear y recuperar fondos robados. Esta colaboración que se extiende a otras criptoempresas en América Latina, Europa y Asia es fundamental para congelar activos y facilitar su eventual devolución a las víctimas.
Los entrenamientos llevados a cabo por agentes de campo del USSS incluyen análisis de casos reales y ejercicios prácticos para que los participantes adquieran experiencia en el rastreo de transacciones complejas y el control de carteras de criptomonedas.
Hasta el momento, este enfoque del USSS ha tenido gran impacto y alcance dentro del ámbito de los fraudes y otros delitos con criptomonedas, ya que al capacitar a socios internacionales, se ha logrado extender el alcance del USSS más allá de las fronteras de estadounidenses para desmantelar organizaciones criminales que operan a nivel global.
Al compartir su experiencia, el USSS no solo mejora las capacidades de investigación, sino que también aumenta la conciencia sobre la magnitud del problema del fraude cripto a nivel mundial. Esto a su vez, apoya el objetivo final de este programa, que es recuperar los fondos robados y devolverlos a sus legítimos dueños, mitigando el impacto devastador que estas estafas tienen en las víctimas.
De esta forma, el USSS está intensificando su ofensiva global contra el fraude y otros delitos en el ámbito de las criptomonedas, constituyendo una nueva línea de ataque contra este tipo de cibercrimen que ha prosperado a nivel global en los últimos años.

