Este martes, el gobierno estadounidense presentó una moción complementaria para la restitución de los fondos confiscados a Ilya Lichtenstein y su esposa Heather Morgan, tras el hackeo del Bitfinex en 2016, los cuales serán devueltos al criptointercambio, considerando incluso las cantidades que se hayan generado a partir de las bifurcaciones duras de Bitcoin (BTC).
El Fiscal de los Estados Unidos para el Distrito de Columbia, Matthew M. Graves, presentó un Memorando de Restitución Complementaria, que incluiría “los 94.643,29837084 BTC recuperados por el gobierno de la billetera del hackeo de Bitfinex, más las cantidades de Bitcoin Cash, Bitcoin Satoshi Vision y Bitcoin Gold generadas a partir de varias bifurcaciones duras)”.
De acuerdo con lo señalado por el fiscal de distrito, todos “estos activos representan ‘propiedad específica perdida’ como resultado del hackeo”, aunque también señala que “esos activos pueden ser pagados a Bitfinex como restitución en especie”.
Como se recordará en 2016, Lichtenstein de 35 años, “hackeó la red de Bitfinex, utilizando herramientas y técnicas de hacking avanzadas”, lo que le permitió autorizar fraudulentamente desde dentro de la red, más de 2.000 transacciones transfiriendo 119.754 BTC de Bitfinex a una billetera de criptomonedas bajo su control, según lo informado por el Departamento de Justicia (DOJ).
Luego, Lichtenstein “tomó medidas para cubrir sus huellas borrando de la red de Bitfinex las credenciales de acceso y otros archivos de registro que podrían haber revelado su conducta a las fuerzas del orden”. Posteriormente al hackeo, “Lichtenstein solicitó la ayuda de su esposa, Heather Morgan, para blanquear los fondos robados”.
Aunque ambos, emplearon “numerosas técnicas sofisticadas de lavado de dinero, incluyendo el uso de identidades ficticias para configurar cuentas en línea; utilizar programas informáticos para automatizar transacciones; depositar los fondos robados en cuentas en una variedad de mercados de la darknet y bolsas de criptomonedas y luego retirar los fondos”, todas sus acciones pudieron ser analizadas por los investigadores y fueron detenidos en 2022.
Incluso llegaron a “convertir bitcoin a otras formas de criptomoneda en una práctica conocida como «salto de cadena»; depositar una parte de las ganancias delictivas en servicios de mezcla de criptomonedas; utilizar cuentas comerciales con sede en Estados Unidos para legitimar la actividad bancaria de la pareja; e intercambiar una parte de los fondos robados en monedas de oro”.
Ambos se declararon culpables de un cargo de conspiración para cometer lavado de dinero y han sido sentenciados a prisión. Los fondos confiscados a la pareja, unos 94.643,29837084 BTC que estaban valorados inicialmente en 3.600 millones de dólares cuando el DOJ lo confiscó en 2022, han triplicado su valor.
Hoy día, esa misma cantidad de BTC recuperado al valor actual, equivale a más de 9.393 millones de dólares, de acuerdo a los datos de CoinGecko, a la tasa de cambio de 99.255,90 dólares por cada BTC.
Sin embargo, de acuerdo con un reporte de investigación de la empresa de análisis blockchain, Chainalysis, dicho monto aumentó significativamente luego de los esfuerzos conjuntos para la recuperación de los fondos por parte de las autoridades estadounidenses.
Chainalysis, explica en su reporte que “el 9 de agosto de 2022, en un conjunto de transacciones no declaradas anteriormente, las autoridades estadounidenses recuperaron 12.267 bitcoins adicionales directamente de las billeteras del robo inicial”.
Luego, “el 18 de noviembre de 2022, las autoridades estadounidenses recuperaron otros 1.155 bitcoins. El 5 de enero, se recuperaron 2,5 bitcoins adicionales. La segunda, tercera y cuarta recuperaciones elevan la cantidad recuperada por las autoridades estadounidenses a más de 108.068 bitcoins” en el caso del hackeo a Bitfinex.
De allí que, el valor total recuperado ahora asciende a unos 10.726.386.601,20 dólares al valor actual, que deberá ser restituido al único afectado conforme a lo sentenciado por el tribunal. Y es que el juez, dictaminó que dichos fondos deben ser devueltos a Bitfinex en forma de “restitución en especie” a la única víctima del caso, es decir al mismo criptointercambio.
En las conclusiones de la Moción de Restitución Complementaria, presentada por el fiscal Graves, dijo que “Por las razones anteriores, no hay una “víctima” para los delitos específicos de la condena en este procedimiento”. En otras palabras, Bitfinex y sus usuarios no cumplen los criterios legales para ser considerados “víctimas” según la Ley de Restitución Obligatoria a las Víctimas.
No obstante, el fiscal reconoció que “el Tribunal tiene la autoridad para ordenar la restitución voluntaria de conformidad con los acuerdos de declaración de culpabilidad de los acusados”, por lo que “dicha restitución voluntaria debe incluir todos los activos confiscados de la billetera de los hackers de Bitfinex”.
Y es que, para que ocurra una restitución de fondos robados que hayan sido confiscados, el gobierno de Estados Unidos, debe reconocer a las víctimas durante el proceso. En este caso, el criptointercambio Bitfinex ha sido reconocido como víctima y por lo tanto, la única entidad elegible para la restitución de los fondos recuperados del hackeo de 2016.
Ello explica porque en 2023, el criptointercambio Bitfinex señaló que había recibido en el mes de julio de ese año, unos 312.219 dólares en efectivo junto a unos 6.917 BCH de parte del Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, como parte de los esfuerzos de recuperación y restitución de los fondos robados, conforme a lo estipulado por el tribunal.