CryptoEats, fue una efímera empresa de comida a domicilio del Reino Unido que en sólo media hora consiguió robar más medio millón de dólares a centenares de usuarios, que habían decidido invertir en un token, de un proyecto que se vendía como falsamente como algo exitoso.
Las personas detrás de CryptoEats hicieron uso de una campaña de marketing viral, en la cual empleó a varios influencers y celebridades británicas para promocionar a través de sus redes sociales esta compañía de delivery absolutamente falsa e inexistente.
La imagen de una marca es una de las cosas más importantes y los estafadores de CryptoEats, lo tenían muy claro desde el principio. De hecho, prepararon un plan en el que, se nota que invirtieron tiempo, ingenio y una suma de dinero importante, que todavía no se ha estimado.
Las personas detrás de CryptoEats buscaron generar cierta confianza en las personas al decir en sus redes, que la tecnología blockchain protegería a los compradores que hicieran su pedido y pagaran con cualquier criptomoneda.
Igualmente, el lanzamiento de CryptoEats contó con la participación de distintos influencers de TikTok para llegar al público más joven, además de algunas celebridades del Reino Unido que apoyaron la falsa marca, para conseguir mayor credibilidad.
Esto lo consiguieron porque todos estos influencers y celebridades promocionaban a CryptoEats subiendo a sus redes sociales fotos y vídeos vestidos de repartidores, con bolsas para entregar los pedidos, muchas de las cuales al día de hoy han sido borradas.
Sólo bastaba con mirar las redes de Bouncer, Joey Essex o del DJ Charlie Sloth (que juntos poseen millones de seguidores en Instagram) promocionando la compañía y su aplicación a través de YouTube, TikTok e Instagram. Por supuesto, no eran los únicos que promocionaban a CryptoEats.
Por otro lado, como apoyo a su campaña de marketing en las calles de Londres se podían observar motorizados identificados con el uniforme y la maleta para delivery de CryptoEats.
Estos eran fotografiados y sus fotos publicadas en las redes en señal de que era una empresa legítima.
Pero ahora, tras más de una semana de haberse destapado el escándalo, Scotland Yard todavía se encuentra investigando a CryptoEats, por haberse quedado con unas £500.000 libras, de estos inversores tempranos de Reino Unido y de otras partes del mundo.
Lo más asombroso es que los estafadores recolectaron esa cantidad de dinero en tan sólo 30 minutos, para después desaparecer de Internet y de la vista de las autoridades, sin dejar ningún rastro, eliminando las cuentas en Instagram, Telegram, Twitter y su página web de CryptoEats.
CryptoEats, prometía que quería ser el principal competidor a futuro de Uber Eats, Glovoo o Deliveroo, lo cual llevó centenares de inversores a colocar dinero, atraídos por ser supuestamente la promesa de una startup de comida a domicilio que buscaba revolucionar el sector.
Para conseguirlo, CryptoEats decía que gracias a que su servicio permitía el pago con criptomonedas, revolucionaría el sector de la comida a domicilio y que según lo informado por esta empresa llegó a valorarse en 16.600 millones de libras.
Otra de las formas que emplearon los estafadores y publicar una nota de prensa, donde señalaban que CryptoEats tenía asegurados acuerdos con gigantes como McDonald’s y el patrocinio de la liga italiana, lo cual atrajo aún más inversores a la estafa.
Esta nota de prensa con su imagen corporativa y una foto del CEO buscando generar confianza, en un hecho insólito fue publicada en más de 100 medios de comunicación, por lo que el mensaje se masificó en Internet buscando la mayor cantidad de inversores para la cryptoestafa
Además, de la nota de prensa, CryptoEats aseguraba que contaba con inversores de primer nivel que habían depositado unos $8 millones de euros en la compañía, por lo que las proyecciones de éxito estaban garantizados en muy poco tiempo.
Incluso los estafadores detrás de CryptoEats, en su nota de prensa también explicaron que utilizaría un software implementado blockchain basado en algoritmos y otras características que prácticamente no tenían.
Obviamente cuando se había creado un clima de interés y Hype en las redes sociales, la empresa anunció el lanzamiento de su propia criptomoneda, los EATS tokens, ideales para invertir en CryptoEats y pagar las compras, aunque también aceptaría el pago con otras criptomonedas.
Estos tokens de CryptoEats (EATS) fueron implementados en la Smart Chain de Binance (BSC BEP-20), con el Contrato: 0xF19F21AAF29167EfbbBb514d309A5BA4b501B4e6, emitiéndose un total de: 7,000,000,000,000,000 EATS, cuyo código de Contrato no tiene más detalles de su creador
“Crypto EATS lanza su criptomoneda el 17 de octubre. Solo les digo que usen la cabeza. (Crypto EATS) tiene dinero y no sabe qué hacer con él”, decía a sus seguidores Harrison Sullivan @hstikkytokky, un popular Tiktoker y personal trainer de UK, con más de 414.000 seguidores
“En una semana, en un mes o en dos meses ese negocio puede ser el mayor servicio de reparto de comida a domicilio en todo el Reino Unido y todavía no está disponible”, aseguró Sullivan cuando todavía no se había destapado el fraude
Cuando llegó el día del lanzamiento CryptoEats y sus EATS tokens, se preparó una fiesta en Londres, a la que acudieron muchos famosos que luego terminaron siendo interrogados por Scotland Yard en búsqueda de los responsables detrás de la estafa.
Una vez que la estafa estaba devalada y la empresa había desaparecido, las personas comenzaron a buscar al supuesto CEO de nombre Wade Phillips. Luego se determinó que no existía porque la foto que fue utilizada para encarnar a Phillips, pertenecía a un banco de imágenes.
“OMG, CryptoEats resultó ser una gran estafa”, publicó Bouncer en una historia de Instagram el lunes. “Me pagaron para hacer un vídeo promocional para su aplicación de comida a domicilio. […] Es un comportamiento repugnante”, dijo Bouncer en un vídeo
Pero Bouncer no fue el único en disculparse, pues otros influencers también ofrecieron disculpas a sus seguidores y señalaron que fueron utilizados. Aunque otros sólo se limitaron a borrar todas las imágenes y menciones a CryptoEats de sus perfiles públicos sin decir más del asunto.
Ahora bien, ¿Qué se debe aprender de este caso?
En un mundo ideal las personas pueden invertir su dinero buscando generar un rédito, en proyectos transparentes, claros, con una buena hoja de ruta y creados por personas con un alto perfil y reconocidos en su área.
Sin embargo, no siempre es así y las personas se dejan llevar más por lo que le muestran que por lo que investiga. Y esa es la palabra clave de toda inversión, “Investigar”.
Conocer dónde y a quién le damos nuestro dinero es una regla básica y saludable para las finanzas.
Todo inversor siempre tiene que al hacer su evaluación del proyecto, tener algo de suspicacia y prestar atención a las señales.
Si una empresa comienza haciendo mucha promoción, buscando crear Hype e invirtiendo cantidades enormes en publicidad, tampoco es buena señal, ya que por regla general, todos estos proyectos comienzan racionalizando sus recursos y dosificando la publicidad.
Cualquier inversión en un proyecto que en lugar de realizarse directamente en su blockchain comprando su token, se realiza en una dirección aparte y en otra criptomoneda, se debe evaluar muy bien, antes de realizar cualquier envío de valor.
Es preciso tener claro que no porque un proyecto tenga un Blockchain activo y visible, con su token listo para recibir compras, quiere decir que sea legítimo y no pueda ser más adelante un fraude.
Es importante recordar que una vez que se invierten criptomonedas, estas no se pueden reclamar para un reembolso, como se puede hacer en PayPal u otros servicios del sistema financiero tradicional.
Cualquier empresa que esté iniciando sus operaciones en el mundo criptográfico, que tengan detrás a personas que no puedan ser identificables, que no posean redes sociales y carentes de la debida reputación, debe ser considerada como de alto riesgo.
Cualquier proyecto relacionado con criptomonedas, debe tener asesores financieros y técnicos reconocibles en el mundo empresarial y/o blockchain que los respalden.
Diseñar un sitio Web y algunas redes sociales, no requiere mucha capacidad técnica y puede ser falso.
Siempre hay que buscar quienes están detrás, quienes apoyan el proyecto y si éstas personas son influencers, lo más seguro es que sea una publicidad pagada, para decir exactamente lo que el cliente quiere que digan.
Cualquier persona que invite a comprar una criptomoneda o token en particular de un tercero por la razón que sea, pudiera estar incurriendo en un Asesoramiento Financiero, lo cual requiere en casi todos los países una formación, una licencia y un permiso especial.
Toda empresa recién creada que decida lanzar un Token de su proyecto e invite a comprarla para hacerlo crecer, está haciendo una Oferta inicial de monedas o Initial coin offering (ICO) disimulada, por lo tanto es un riesgo colocar valor en algo que de lo que no se tiene mayor información.
Por último, si se ha investigado a la empresa, y se ha constatado quienes están detrás, quienes la asesoran financiera y técnicamente. Es allí que comprendiendo que “toda inversión es un riesgo, y nadie debe invertir más de lo que esté dispuesto a perder”, se toma la decisión.