Durante este martes y miércoles, Caroline Ellison, la que fuera novia de Samuel Bankman-Fried, alias «SBF», de 31 años, y co consejera delegada de Alameda Research, la compañía mediante la cual se desviaron fondos de los clientes de FTX, testificó ante el tribunal que el ex CEO y fundador de la plataforma FTX, le ordenó cometer delitos entre los que se encontraba el desvío de capitales de los clientes.
La exnovia de Bankman-Fried como alta ejecutiva de la plataforma de criptomonedas, es para muchos la testigo principal de la trama que desvió miles de millones de dólares fraudulentamente de los clientes del criptointercambio.
Ellison, que alcanzó un acuerdo con la Justicia para declararse culpable de siete cargos y así ver reducida su pena, testificó ante un tribunal federal de Manhattan, Nueva York, durante más de un día y medio, donde mostró la otra cara de SBF, ya que como novia tenía un conocimiento íntimo tanto de la empresa como de Bankman-Fried.
La joven ex ejecutiva de FTX, en su testimonio (a veces entre sollozos), acusó directamente a Bankman-Fried de ser el cerebro detrás de un esfuerzo concertado para robar miles de millones de dólares a clientes, inversores y los prestamistas de la criptoplataforma.
En concreto, Ellison, testificó el martes diciendo que ella siguió las directrices de Bankman-Fried cuando sustrajeron “alrededor de 14.000 millones” de dólares de los clientes de FTX antes de que colapsara el año pasado.
“Él (refiriéndose a SBF) fue quien ideó los sistemas que permitieron que Alameda obtuviera el dinero de los clientes y él fue el que nos dio las órdenes de coger ese dinero para pagar nuestros préstamos”, aseguró Ellison en la primera sesión.
Del mismo modo, este miércoles, Ellison continuó declarando que incluso llegó a falsificar las cuentas de Alameda Research, nuevamente, según su versión, por orden de Bankman-Fried, con el objetivo de seguir accediendo a una línea de crédito. Y es que la exnovia de SBF lo retrató como la persona que tomaba las decisiones en la empresa y que, según ella, sólo dirigía nominalmente.
La fiscalía en base al testimonio de la ex ejecutiva de FTX y Alameda Research, explicó que el dinero se sustrajo no solo para afrontar las deudas que contraía esa empresa, sino que también se destinaba a inversiones de alto riesgo y a la compra de artículos de lujo como mansiones.
“Bankman-Fried creía que la única norma moral válida era hacer lo que fuera necesario para maximizar el beneficio”, testificó Ellison durante su comparecencia al juicio que se lleva a cabo en una corte de Nueva York.
Por su parte, Bankman-Fried de 31 años, acusado de fraude y conspiración criminal, está enfrentando en este juicio siete cargos criminales que podrían enviarlo a prisión por el resto de su vida, aunque el joven empresario caído en desgracia ha dicho muchas veces que él, siempre ha actuado de “buena fe” y que en todo caso, sólo estuvo mal asesorado.
Pero los testimonios de Ellison, lo desmienten, y exponen a un Bankman-Fried calculador y sin escrúpulos que pocas personas conocen. Sin embargo, los abogados de Bankman-Fried justifican la transferencia de fondos como préstamos legítimos.
Por su parte, los fiscales están intentando presentar esta acción como prueba del fraude que usó miles de millones de dólares del dinero de los clientes de FTX, para tapar agujeros financieros en las finanzas de Alameda Research, además de realizar inversiones especulativas y financiar el lujoso estilo de vida de SBF.
En su testimonio, Ellison describió su papel como frustrante, pues a pesar de ser la CEO de Alameda Research, ella no tomaba las decisiones clave ni importantes, ni tampoco recibió un aumento cuando fue ascendida.
La joven exnovia de Bankman-Fried, dijo que este continuó tomando decisiones clave incluso después de que dejó Alameda Research formalmente para concentrarse en la plataforma FTX. “Manejé muchas decisiones y responsabilidades del día a día en Alameda”, testificó.
Ellison continuó testificando en el tribunal: “Pero para cualquier decisión importante, siempre la consultaría Sam, y siempre le daría la razón a Sam si pensara que deberíamos hacer algo”. Pero, cuando la fiscalía le pidió que explicara por qué esa actitud tan deferente, Ellison respondió que siempre hubo una dinámica de poder difícil entre ella y su exnovio.
“Yo diría que durante todo el tiempo que estuvimos saliendo, él también fue mi jefe en el trabajo, lo que creó algunas situaciones incómodas”, testificó la ex CEO de Alameda Research. Además, ella describió a Bankman-Fried como alguien temerario y dispuesto a asumir una cantidad extraordinaria de riesgos con los fondos de FTX, un testimonio que sin duda hunde más a SBF.
De igual modo, Ellison enfocó parte de su testimonio en señalar que Bankman-Fried tenía predilección por los juegos de azar y alta tolerancia al riesgo, recordando cómo una vez habló de estar dispuesto a perder 10 millones de dólares si salía cruz al lanzar una moneda, siempre y cuando tuviera la oportunidad de ganar más de 10 millones de dólares si salía cara.
Ellison en su testimonio, señaló que Bankman-Fried, tenía este mismo enfoque para administrar sus negocios, y recordó como en 2021, SBF quería que Alameda Research gastara 3 mil millones de dólares en una serie de inversiones especulativas en empresas emergentes.
Bankman-Fried, le encargó a Ellison que hiciera un modelo de cómo es inversión podría afectar el balance de Alameda Research. En ese análisis, descubrió que una inversión de ese monto, tal como fue concebida, “colocaría a Alameda en una posición significativamente más riesgosa y haría mucho menos probable o casi imposible que pudiéramos pagar nuestros préstamos si todos nuestros préstamos fueran cancelados a la vez”.
Ellison declaró que cuando presentó esos resultados a Bankman-Fried, sugiriéndole que dicha inversión sería demasiado arriesgada dado el estado de las finanzas de Alameda, simplemente SBF le ordenó que siguiera adelante.
Por otro lado, la joven ejecutiva, describió la situación financiera de Alameda Research como cada vez más precaria a medida que avanzaba el año 2022, lo que según señaló que le causaba estrés. Por ello abordó a Bankman-Fried para consultarle sobre el balance de la empresa, notando problemas crecientes con la capacidad de la compañía para pagar los préstamos.
Ellison durante esta parte del testimonio, sólo dijo: “Este fue un momento de crisis para Alameda”. Y debido a que comenzaron a recibir aún más dinero de los clientes de FTX, estos fondos se usaron para pagar los préstamos de Alameda Research, ya que era “la única opción sobre la mesa”.
Es así que a finales del verano de 2022, Alameda Research había canalizado más de 14 mil millones de dólares de clientes de FTX, sin su conocimiento o consentimiento expreso. Ellison, en su testimonio justificó “Estábamos en una mala situación”.
Luego señaló que Bankman-Fried le ordenó manipular hojas de cálculo para hacer que el panorama financiero de Alameda Research pareciera más favorable, algo que hizo varias veces a solicitud de SBF, ocultando casi 5 mil millones de dólares en préstamos personales.
De acuerdo con lo dicho por Ellison, Bankman-Fried le pidió que ignorara las solicitudes de información adicional de los prestamistas, como cuando un ejecutivo de Genesis, que había dado a Alameda cientos de millones de dólares en préstamos, solicitó un balance actualizado. Ante esto, Bankman-Fried “sugirió que debería encontrar algunas formas alternativas de presentar la información”.
A partir de allí, Ellison creó siete opciones, bajo las órdenes de SBF. Según el testimonio de Ellison, este le aconsejó enviar una versión que minimizara el tamaño de las deudas de Alameda Research, mientras al mismo tiempo aumentaba el valor de las tenencias del token FTX (FTT) de la empresa.
Ellison contó que ante la desesperación por conseguir fondos, SBF habló varias veces sobre intentar obtener dinero de Mohammed bin Salman, el príncipe heredero de Arabia Saudita y utilizar ese dinero para pagar a los prestamistas de Alameda Research, algo que nunca se llegó a concretar.
Y también contó cómo sobornaron con 100 millones de dólares a funcionarios del gobierno chino, para recuperar activos de Alameda Research, delito por el cual Bankman-Fried, no está siendo juzgado. El juez Lewis Kaplan, permitió el uso de ese testimonio “para fines limitados” para demostrar “la confianza” que Ellison y Bankman-Fried tenían el uno en el otro.
Sin embargo explicó a los miembros del jurado que la acusación de soborno a un funcionario extranjero no es uno de los cargos en este juicio y por lo tanto, esta parte del testimonio, no debía ser tomada en cuenta para el veredicto.
Este primer round de testigos con Ellison a la cabeza, ha sido demoledor para SBF, que debe estar viendo que cada vez se le cierran las oportunidades de un juicio favorable o una rebaja de pena.