El reciente recorte de tasas de la Reserva Federal, el primero en cuatro años, ha generado diversas especulaciones en torno a los mercados financieros. Con los activos de riesgo como Bitcoin en la mira de los inversores, las criptomonedas podrían enfrentar un escenario volátil pero también lleno de oportunidades. Este contexto pone en evidencia la relación entre la política monetaria de EE.UU. y el comportamiento del mercado cripto, lo que podría influir en la dirección de los precios a corto y mediano plazo. Esta es la opinión de Vivien Lin, Chief Product Officer de BingX.
El 18 de septiembre, la Reserva Federal de Estados Unidos redujo su tasa de referencia de fondos federales en 50 puntos básicos a un rango de 4,75%-5%. Este es el primer recorte de tasas en cuatro años después de su ciclo más agresivo de subidas de tasas. Tradicionalmente, un fuerte recorte de tasas de la Fed podría indicar preocupaciones económicas subyacentes en lugar de ofrecer tranquilidad, lo que puede afectar a los activos de riesgo como Bitcoin.
Sin embargo, Bitcoin y otras criptomonedas pueden beneficiarse de tasas de interés bajas, que se consideran activos «de riesgo». Estas inversiones y las acciones estadounidenses, como las acciones tecnológicas, tienden a experimentar movimientos de precios más volátiles.
Este evento también puede impulsar a los inversores a alejarse de las monedas fiduciarias y explorar alternativas como Bitcoin, que a menudo se considera una fuerte cobertura contra la inflación. Es importante señalar que cuanto más agresiva sea la flexibilización, peor tienden a reaccionar los mercados. Esto se debe precisamente a que el mercado de valores ve la flexibilización como una señal de que el banco central está luchando por mantener la estabilidad.
Naturalmente, estas discusiones generales deben analizarse desde una perspectiva única. Es importante enmarcar su perspectiva dentro del contexto más amplio de factores macroeconómicos específicos, incluida la estabilidad de un país, la moneda fiduciaria y el estado del mercado laboral. Sin embargo, Bitcoin necesitaba un punto de inflexión, ya que después de subir brevemente por encima de los $ 70.000 en julio, BTC ha luchado por mantenerse por encima de los $ 60.000. La moneda es débil a negativa en el mediano plazo, con soporte en $ 55.000 y resistencia en $71.000.
Sin embargo, los picos y caídas de volumen no se alinean bien con los movimientos de precios, lo que debilita la moneda y aumenta la probabilidad de una ruptura. Será esencial observar los precios no solo durante los próximos meses, sino también en el cronograma a largo plazo.
El ajuste de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal abre una fase de incertidumbre para Bitcoin, que se encuentra en un punto crucial de su ciclo de mercado. Con un soporte y resistencia clave en juego, la evolución del mercado dependerá en gran medida de cómo los inversores interpreten la flexibilización monetaria. Lo que ocurra en los próximos meses será decisivo no solo para Bitcoin, sino también para la percepción de las criptomonedas como una posible cobertura frente a la inestabilidad económica.