El lunes de la semana pasada, la Corte Suprema de Estados Unidos, dio luz verde al Servicio de Marshals de ese país, para que venda los 69,370 Bitcoin (BTC) que el Departamento de Justicia (DOJ, «por sus siglas en inglés») confiscó en 2021 de Silk Road, el famoso mercado clandestino de la Dark Web, tras rechazar una apelación que buscaba desafiar la propiedad de estos criptoactivos incautados.
Desde hace dos años, la empresa Battle Born Investments Company LLC, viene sosteniendo en varias instancias que había adquirido los derechos sobre los 69,370 BTC que están bajo el control del Servicio de Marshals de Estados Unidos (USMS, «por sus siglas en inglés»), mediante una quiebra relacionada con el caso de Silk Road.
Pero con esta decisión de la Corte Suprema de Justicia estadounidense de no dar audiencia a la apelación de Battle Born Investments Company, respaldando el fallo de 2022 del Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Norte de California, quedó plenamente autorizado el USMS para vender todos los BTC que ya habían sido repartidos y transferidos entre varios criptointercambios meses atrás, comenzando por Coinbase.
En concreto esta empresa ha estado disputando legalmente la propiedad de los BTC incautados en la residencia de James Zhong, de 32 años, en una redada no anunciada, así como también aquellos fondos en Bitcoin Gold (BTG), Bitcoin SV (BSV) y Bitcoin Cash (BCH), que estén asociados la dirección: 1HQ3Go3ggs8pFnXuHVHRytPCq5fGG8Hbhx.
Battle Born Investments Company, junto a First 100, LLC y 1st One Hundred Holdings LLC, habían solicitado el año pasado una apelación para que Richard Seeborg, Juez de Distrito Principal del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Norte de California, les concediera la custodia y disposición de los fondos asociados a un decomiso civil por parte del DOJ.
Ellos afirmaban que tenían los derechos sobre los fondos incautados del mercado en línea Silk Road, por lo que reclamaban la propiedad de todos los bienes que estaban en custodia del USMS. Según lo indicado por Battle Born Investments Company, con sede en Nevada, una persona no identificada, había robado los BTC tomados de Silk Road, para referirse a Zhong.
No obstante, la Corte Suprema, rechazó su pedido de audiencia demostrando que no tenían tales derechos sobre estos bienes incautados, indicando en el texto de la sentencia: “Se deniega la moción del peticionario para que se le permita proceder in forma pauperis y se desestima la petición de un auto de mandamus”.
Ahora que se ha acreditado correctamente la propiedad de los 69,370 BTC, valorados en casi 4,35 mil millones de dólares, al cambio actual al momento de redactar esta nota según CoinGecko, el gobierno federal de Estados Unidos, puede proceder con su venta, lo que tiene a algunos inversores nerviosos porque una inundación del mercado podría derrumbar la cotización de las criptomonedas incautadas.
Sin embargo, algunos analistas afirman que el USMS en nombre del gobierno de los EEUU, seguramente operará en para salvaguardar los intereses del gobierno durante la venta, impidiendo las posibles pérdidas en esa operación que ha sido calificada como la más grande negociación de BTC incautado en la historia.
De hecho, aunque muchos inversores creen que una venta masiva podría desencadenar una sobreoferta que derrumbe la cotización de BTC, lo cierto es que las esperanzas están cifradas en que la venta sea realizada en el mercado extrabursátil (OTC, «por sus siglas en inglés»), o si es viable se realice en pequeñas cantidades durante un período más largo, para reducir el impacto de colocar a la venta casi 70 mil BTC en los mercados.
En cambio otros analistas, consideran que eso no pasará, ya que estamos en época preelectoral y a pocos días de las elecciones presidenciales, las cuales podrían marcar un nuevo rumbo con respecto a las criptomonedas, por lo que es probable que esta decisión quede en manos de la próxima administración.
Vale destacar que de ganar el candidato republicano, el expresidente Donald J. Trump, ya había prometido un destino totalmente diferente para los BTC que el gobierno había incautado a Silk Road, ofreciendo establecer una “reserva estratégica de Bitcoin” para Estados Unidos.
“Como parte final de mi plan hoy, anuncio que si soy elegido, será la política de mi administración en los Estados Unidos de América, mantener el 100% de todos los Bitcoin que el gobierno de EEUU posee actualmente o adquiera en el futuro”, manifestó Trump.
Para tal fin Trump, prometió mantener el 100% de los BTC del gobierno durante la conferencia Bitcoin 2024, en Nashville, Tennessee, que se llevó a cabo en julio. Además, el exmandatario en su discurso dijo que “Estados Unidos será la capital criptográfica del planeta y la superpotencia Bitcoin del mundo”, lo que ha generado gran expectativa entre los bitcoiners.
El exmandatario, también prometió que el primer día, terminará con la guerra contra las criptomonedas despidiendo al actual presidente de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, «por sus siglas en inglés»), Gary Gensler, el cual ciertamente, ha sido una de las figuras más agresivas contra el ecosistema criptográfico en Estados Unidos.
Sin embargo, un par de días después como una forma de alterar los planes del republicano, la administración del presidente Joe Biden, decidió repartir entre diferentes criptointercambios varias cantidades en BTC confiscado a Silk Road que todavía estaban en poder del USMS.
Aunque muchos, criticaron a Trump por haber revelado sus planes con los fondos incautados en poder del gobierno, la mayor parte de las críticas se centró en la administración Biden-Harris que tomó la decisión de vender los activos digitales.
De allí que, estos críticos están preocupados con una posible victoria de la candidata demócrata, Kamala Harris, ya que de hacerlo, lo más probable es que se continúen con los planes de venta de estos fondos incautados y ya no se podrá crear la “reserva estratégica de Bitcoin” prometida por Trump, que se convirtió en el sueño de muchos inversores minoristas, mayoristas e institucionales.