En un reporte de hace unos días atrás del diario británico DailyMail, se afirmó que traficantes de drogas del Reino Unido fueron capaces de crear su propia criptomoneda para blanquear dinero relacionado con sus operaciones delictivas, en lo que se ha convertido en el primer caso de este tipo en Gran Bretaña y una evolución en el uso del crimen organizado de las criptomonedas.
Según declaraciones de Gary Carroll, de Claymore Advisory Group, una banda de narcotraficantes con sede en el Reino Unido ha lanzado su propia criptomoneda, una “memecoin”, para blanquear ganancias ilícitas.
Carroll, explicó que este método permite a las bandas intentar legitimar las ganancias ilícitas aprovechando la naturaleza especulativa de la cultura de los memes, las cuales están basadas en simples memes de internet, bromas o tendencias virales de las redes sociales.
A diferencia de otras criptomonedas como Bitcoin (BTC) o Ethereum (ETH), que suelen tener un propósito tecnológico o financiero específico, las memecoins a menudo se crean por diversión o como un experimento social.
Su popularidad y valor están impulsados principalmente por el sentimiento de la comunidad en línea y el hype o la exageración en las redes sociales, en lugar de por una tecnología subyacente sólida o casos de uso prácticos, por lo que son ideales para ganancias rápidas y lavar dinero a través de la compra-venta de este tipo de activo digital popular.
Además, Carroll señaló que las rápidas fluctuaciones en el valor de las monedas meme ofrecen oportunidades para que los actores ilícitos creen fachadas aparentemente legítimas, enmascarando sus actividades ilegales como comercio de criptomonedas.
De acuerdo a lo comentado por Carroll, la banda pretende inflar el precio de la moneda mediante marketing online y luego liquidar sus activos, presentando las ganancias como ganancias provenientes de actividades comerciales lícitas con criptomonedas en lugar de narcóticos.
Predijo que, en los próximos uno o dos años, es probable que surjan ramificaciones legales de estas actividades en el Reino Unido y que esto podría convertirse en un método normalizado para que los delincuentes semilegitimen sus operaciones. Aunque, Carroll no reveló cual era el nombre del proyecto, sin duda las autoridades británicas y europeas, estarán buscando de cual se trata.
Tras estas declaraciones de Carroll, es muy probable que las siguientes regulaciones que podrían estar cocinándose en muchos países, sobre todo a nivel de Europa, podrían apuntar al mercado de las criptomemes para impedir el blanqueo de capitales ilícitos de bandas del crimen organizado.
Hasta ahora, el crimen organizado hacía un uso simple de los activos digitales, resguardo de valor, inversiones o pagos. De hecho, en un informe del mes pasado de Chainalysis se afirma que el crimen organizado en México, como el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), usan activos digitales para adquirir precursores químicos para la elaboración de “opioides sintéticos, incluido el fentanilo, que luego trafican y distribuyen en Estados Unidos”.
La firma de análisis blockchain con sede en Nueva York, señaló que estos pagos en criptomonedas alimentan el comercio del mercado internacional del fentanilo los cuales abarcan transacciones entre China, México y Estados Unidos, pero su influencia va más allá.
Para Chainalysis, “las criptomonedas no solo permiten la compra de precursores químicos sin interacción física, sino que también forman parte de un sistema más amplio de banca clandestina y facilitación financiera que abarca México, Estados Unidos y China”.
Y es que de acuerdo con el reporte de Chainalysis, “las redes chinas de lavado de dinero, incluyendo a ciudadanos chinos radicados en Estados Unidos, colaboran cada vez más estrechamente con redes de narcotráfico, en particular con las organizaciones mexicanas delictivas, para blanquear sus ganancias ilícitas, a menudo utilizando criptomonedas”.
Este sistema de banca clandestina, opera brindando beneficios en ambos puntos de la cadena. Por un lado, en vista que “los ciudadanos chinos tienen prohibido comprar más de 50.000 dólares en moneda extranjera”, según Chainalysis, “el uso de redes bancarias clandestinas vinculadas al tráfico de fentanilo ofrece una forma de evadir los controles de capital del país”.
Y es que, si bien es cierto que en China, todavía continúan vigentes las prohibiciones de las criptomonedas, un sector de su industria local, “sigue siendo la principal fuente mundial de precursores de fentanilo, servicios de envío y otros productos, como los kits de matriz TDP, que se utilizan para prensar pastillas falsificadas”.
De hecho, Chainalysis ha hecho un seguimiento exhaustivo a lo largo de varios años del mercado de los precursores del fentanilo que venden empresas chinas en virtud de sus acuerdos con las fuerzas del orden para proporcionar una infraestructura dedicada al análisis de transacciones vía blockchain.
Este seguimiento ha abarcado hasta ahora unos cinco años de datos en cadena, entre 2018 y 2023, por lo que se ha determinado, que “un grupo de presuntos traficantes de productos químicos con sede en China recibió más de 37,8 millones de dólares en criptomonedas”.
El origen de estos pagos, radica en México donde están los principales clientes de estos productos “opioides sintéticos, incluido el fentanilo”; los carteles de la droga, quienes después de obtener los precursores, cocinan la droga para después comenzar su distribución a Estados Unidos principalmente.
Sin embargo, China no es el único lugar del mundo donde se producen estos precursores, aunque sí es el mayor productor del mundo y por mucho, razón por la cual, los investigadores de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro han designado empresas y ciudadanos fuera de EEUU por estos hechos.
Y es que Chainalysis, señaló que la OFAC también en 2023, designó “a Valerian Labs, con sede en Canadá, junto con su propietario canadiense, Bahman Djebelibak (alias Bobby Shah)”, como un destacado facilitador de empresas chinas sancionadas, como Jinhu Menshing.
Esta es una entidad con sede en China que anuncia punzones y matrices para prensas de tabletas con marcas farmacéuticas, las cuales vende en Internet, proporcionando incluso las matrices para pastillas de oxicodona falsificada.
Asimismo, a principios del mes de marzo de este año, designó en la lista de la OFAC de Nacionales Especialmente Designados (SDN) y Personas Bloqueadas, al ciudadano iraní y administrador de Nemesis DNM, Behrouz Parsarad, por facilitar la venta de fentanilo y otras drogas en todo el mundo, incluido Estados Unidos.
Estas personas y entidades formaban parte de una designación más amplia de la OFAC, dirigida a limitar la cadena de suministro para la compra y facilitación de la distribución de precursores químicos para la producción de narcóticos ilícitos, incluido el fentanilo, aunque todavía falta mucho trabajo por hacer para golpear contundentemente a estos actores.
No obstante, los pagos por Internet con criptomonedas como parte de esta estructura del tráfico de drogas, es apenas una pequeña parte del dinero fiduciario en efectivo que mueve el crimen organizado en todo el mundo.
Lo que llama la atención, es que este tipo de organizaciones sean capaces de crear activos digitales -y tengan la capacidad técnica para hacerlo-, para luego que posteriormente puedan ser pasados como proyectos legítimos que crezcan a la sombra de lavado de capitales provenientes de actividades ilícitas.