Entrevistamos a un usuario de la Deep Web
Por Óscar Domínguez
Las estafas están a la orden del día, todos los años por estas fechas nos avisan por activa y por pasiva que podemos sufrir debido al alto volumen de transacciones que se efectúan en Navidad. En el mundo real hay mecanismos que nos protegen . Pero ¿cómo lleva Bitcoin el tema de fraudes siendo una moneda pseudoanónima?. Entrevistamos a un usuario de la Deep Web que prefiere permanecer anónimo.
Desde un entorno seguro de la red TOR y conociendo determinadas páginas de la Deep Web se puede adquirir información sustraída de forma ilícita relativa a cuentas bancarias, cuentas de Paypal, Ebay, números de tarjetas de pago y sus respectivos passwords o números secretos.
Una vez adquirida, esta información se puede usar en Exchanges de Bitcoin o sitios de compra venta de Bitcoin. Usando entidades falsas y direcciones de correo anónimas (o de un solo uso), un usuario puede comprar Bitcoin. Para cuando el Exchange puede verificar que la información suministrada para el pago es ilícita, los Bitcoin ya están en la Blockchain, y han podido haberse movido por miles de direcciones.
¿Qué se puede hacer con esta metodología?
Por su puesto que nada bueno…
Desde movimientos en mercado de cambio, bloqueos de Bitcoin dejándolos inservibles (ya que se pondrían en punto de mira para cuando se usaran), hasta cualquier suposición que le pueda pasar por la cabeza, sobre todo si se realizara de modo masivo…es más común en otro tipo de operaciones que se realizan en Deep Web.
¿Podría explicarnos en que tipo de operaciones se usa este método?
Este tipo de procedimiento complicado y nada recomendado se usa en otro tipo de operaciones de compra venta en Deep Web…sinceramente nada legal…trafico de armas, drogas…con la diferencia que el objeto adquirido necesita de una dirección física que se puede rastrear…pero eso ya es otro tema distinto.