En nuestra entrega anterior, explicamos detalladamente el primero de los informes publicado esta semana por el Banco de Pagos Internacionales (BPI), relacionados con el ecosistema de las criptomonedas y las monedas digitales de bancos centrales (CBDC, «por sus siglas en inglés»), que concluye que las criptomonedas son “inadecuadas para desempeñar un papel importante en el sistema monetario”, por lo que abre el camino para las CBDC.
Ahora, abordaremos el segundo informe que fue publicado este martes, denominado “Lecciones aprendidas sobre las CBDC”, el cual fue presentado a los Ministros de Finanzas y Gobernadores de Bancos Centrales del G20, con motivo de la próxima reunión de Ministros de Finanzas y Gobernadores de Bancos Centrales (FMCBG, «por sus siglas en inglés»).
Dicha reunión se celebrará entre el 13 y 16 de este mes en la India, con Narendra Modi, primer ministro de ese país como presidente del grupo. Este segundo informe, es más técnico en cuanto a la temática de cómo los bancos centrales del mundo están intensificando sus esfuerzos en preparar el terreno para las CBDC y sus implicaciones para el futuro de las relaciones comerciales.
Estos esfuerzos por lanzar las CBDC, como efectivo digital (rCBDC) “dirigidas al usuario minorista” o como reservas tokenizadas (wCBDC) “dirigidas al usuario mayorista”, están siendo impulsados por el Centro de innovación del BPI (BISIH, «por sus siglas en inglés») para ayudar a los bancos centrales en su desarrollo de sus propias CBDC y para analizar las lecciones aprendidas.
Hasta el momento, de acuerdo al informe del BPI, su Centro de Innovación en los últimos tres años ha llevado a cabo 29 proyectos, de los cuales 12 están relacionados con CBDC que cubren el comercio minorista y mayorista tanto en un contexto nacional como transfronterizo.
Y es que el BISIH es el encargado de desarrollar bienes públicos en el espacio tecnológico del BPI, con la finalidad de apoyar a los bancos centrales y mejorar el funcionamiento del sistema financiero global. Para lograrlo, posee varios centros en todo el mundo y una red global de expertos en innovación de bancos centrales.

De acuerdo al texto de este segundo informe, de estos 12 proyectos de CBDC, impulsados por el BISIH para los casos de uso doméstico, dos proyectos investigan las wCBDC y cinco analizan las rCBDC.
Para el caso de las CBDC transfronterizas, cuatro experimentos analizan wCBDC, mientras que otro proyecto reciente fue el primero en analizar el desafío de una rCBDC transfronteriza, en cuyos casos, en la mayoría de los experimentos con las CBDC, se emplearon tecnologías de contabilidad distribuida (DLT, «por sus siglas en inglés»).
Sin embargo, el BISIH en su informe aclara que este tipo de tecnologías descentralizadas de DLT, aunque ofrecen muchas posibilidades, no necesariamente hace que las CBDC, deban basarse en ellas.
Los dos primeros proyectos de CBDC (Aurum y Helvetia). El primero, (proyecto Aurum) desarrolló un prototipo de billetera rCBDC que emula el marco actual de dos niveles para la emisión de billetes en la RAE de Hong Kong.
Por su parte, (proyecto Helvetia) se encargó de probar cómo los activos “tokenizados” se pueden liquidar en dinero del banco central, aprovechando una plataforma digital totalmente regulada basada en DLT, la cual fue demostrada en Suiza como SIX Digital Exchange (SDX).
Posteriormente, la segunda etapa correspondió al programa de pagos transfronterizos del G20 y exploró “cómo entregar pagos transfronterizos (y liquidación de valores) más rápidos, más baratos y más transparentes” utilizando una wCBDC.
En ese caso, (proyectos como Jura, Dunbar y mBridge) pudieron demostrar que los sistemas comunes “que abarcan múltiples wCBDC son operativamente viables y pueden generar eficiencias en los procesos”.
Luego, a solicitud de los propios bancos centrales, se analizaron las rCBDC nacionales, para lo cual, el BISIH se centró en desafíos de diseño específicos que incluyeron cómo usar interfaces de programación de aplicaciones (API) para “distribuir y liquidar rCBDC” con el (proyecto Rosalind).
Aunado a ello, se encargaron de “garantizar una arquitectura rCBDC abierta y accesible cibersegura” con el (proyecto Sela), además de “implementar y operar plataformas CBDC que son seguras y resistentes, fuera de línea y en línea” con el (proyecto Polaris).
Y finalmente, desarrollaron un sistema CBDC que preserve “la privacidad de las transacciones”, sea “resistente a los ataques informáticos cuánticos” y pueda “manejar grandes volúmenes de transacciones” llamado (proyecto Tourbillon).
Por otra parte, el BISIH dijo en su informe, que había desarrollado una plataforma de experimentación DLT interna, conocida como Arena, que ofrece “la opción de privacidad a través de las llamadas cuentas ocultas”.
Esta plataforma Arena, se está utilizando en el (proyecto Mariana), que “analiza el comercio y la liquidación de divisas en un futuro” donde los bancos centrales han emitido CBDC mayoristas, aplicando conceptos desarrollados en finanzas descentralizadas (DeFi).

Igualmente, el BISIH sostiene que algunos de estos proyectos demostraron que liquidar activos tokenizados en dinero del banco central son factibles en un entorno casi reales, pero también desde la perspectiva del banco central, gracias su simpleza operativa, no requieren cambios en los “sistemas existentes operados” y genera menos fricción.
En los diferentes tipos de CBDC, el informe encontró que las wCBDC serán impulsadas por la búsqueda del sector público y privado para dar forma al futuro del comercio y la liquidación, mientras que el caso de la rCBDC, es una tarea compleja no solo para los bancos centrales, que aún está en proceso.
Para el BPI, los acuerdos de CBDC transfronterizos son un territorio nuevo y más complicados que sus contrapartes nacionales, por lo que “es probable que las plataformas comunes tengan más ventajas y brinden eficiencias operativas potenciales en comparación con los acuerdos actuales, pero los diseños radiales brindan más flexibilidad para los sistemas domésticos y, por lo tanto, son más fáciles de contemplar al menos en el corto plazo”.
Es por ello, que en el informe del BISIH se señala que “todas estas innovaciones significativas reúnen lo deseable con lo factible y viable”, por lo que a juicio del BPI, el futuro del dinero fiduciario podría ser al igual que las criptomonedas, digital, ya que “al aprovechar las nuevas tecnologías, los bancos centrales pueden brindar nuevas soluciones a muchos desafíos operativos y preguntas de política «antiguos«”.
Asimismo, de acuerdo con el texto del informe, el trabajo sobre las CBDC de cualquier jurisdicción puede beneficiarse de las lecciones aprendidas en los experimentos de otros bancos centrales y el BISIH, ya que estos proyectos “están ayudando a informar el trabajo de los bancos centrales y otros legisladores y formuladores de políticas sobre las opciones tecnológicas que subyacen a una CBDC”, mientras experimentan bajo el paraguas de BISIH.
De allí que, “mirando hacia el futuro, el BISIH seguirá trabajando en el «qué» y el «cómo» de las CBDC”. No obstante, el informe advierte que a pesar del éxito de estos proyectos, “aún se necesita más trabajo para explorar técnicas aspectos como la escalabilidad y el rendimiento, la coexistencia de infraestructuras tradicionales y basadas en DLT, la seguridad cibernética y la resiliencia, así como los arreglos legales”.
“De igual modo, será necesario abordar las compensaciones complejas entre estas características, incluida la forma de equilibrar la escala, la velocidad y el acceso abierto con seguridad, y cómo equilibrar la funcionalidad fuera de línea con la complejidad y la seguridad”, señala el informe.
Si bien es cierto, que no todos los bancos centrales están muy avanzados en el desarrollo de sus propias CBDC, la ventaja que les da acceder al know-how de experimentación del BISIH, les ofrece una ventaja al momento en que tengan que explorar dicha tecnología en el futuro cercano.
De hecho, en el primer informe del BPI se señala que, en una encuesta realizada a 86 bancos centrales, se evidenció que “la proporción que participa en algún tipo de trabajo de CBDC ha aumentado al 93% y que el trabajo en CBDC minorista está más avanzado que en CBDC mayorista”, lo cual es una señal que a medida que la tecnología madure, esta será implementada.